Hamilton definió como "valiente" la decisión de su equipo de realizar un "cambio dramático" en su coche, lo que supuso un "esfuerzo extraordinario" que mereció la pena, ya que el McLaren sufrió un "giro sorprendente".
"Estoy realmente contento con la vuelta que he dado. El coche ha ido fantástico y todo se lo debo a los chicos de la fábrica, de la oficina de diseño y a los que fabrican los componentes. Tienen que darse una gran palmadita en la espalda", dijo el inglés.
"Sin embargo, a pesar de que estaba satisfecho con mi actuación de hoy, mi KERS dejó de funcionar a mitad de la última vuelta, tenía un 40 por ciento restante que no podía desplegar, pero habría valido la pena por un par de décimas extra. Aún así, es bueno saberlo, porque la plataforma del coche es algo que definitivamente podemos aprovechar", explicó el piloto.
Hamilton aseguró que la carrera "será larga" y que no se decidirá "en la primera curva" a la vez que dijo que necesitan "llevarse algunos puntos a casa" ya que saben que su coche "sólo puede mejorar".
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